Montar en bici a veces puede ser incomodo e incluso producir
lesiones crónicas al ser un deporte de tipo cíclico y por tanto con elevada repetición
del gesto. Por eso el diseño de la bicicleta es mas importante de lo que pensamos, así como una correcta adecuación de esta a la persona que la
monta y por supuesto el tipo de bicicleta utilizada para el tipo de practica.
En un estudio realizado por Balasubramanian y cols. . Appl Ergon 2014.
cuyo objetivo fue investigar la actividad muscular durante el ciclismo en tres
diseños diferentes de bicicleta: rígida (RF), suspensión (SU) y sport
(SP) ,utilizando electromiografía de superficie (sEMG), se adquirieron de forma
bilateral a partir del extensor radial del carpo (ECR), trapecio medial (TM),
el dorsal ancho medial (LDM) y erector de la columna (ES), durante 30 minutos
de pedaleo en cada bicicleta y después de montar en bicicleta. Desde
el estudio de sEMG, se encontró que la fatiga en LDM y ES derecho fueron
significativamente (p <0,05) más alta en bicicleta SP. Esto fue
corroborado por una evaluación psicofísica basada en la escala de dolor RBG. El
estudio también mostró que había una fatiga significativamente menor con la
bicicleta SU que las bicicletas de RF y SP.
Es importante saber que tipo de bicicleta vamos a utilizar
dependiendo del tipo de práctica de ciclismo que queramos realizar, pero también hay que
tener en cuenta las características individuales de cada persona , y por tanto
a veces es necesario que un profesional de la biomecánica en ciclismo realice los
ajustes necesarios en ella para adecuarla lo mas posible a nuestras características
y así evitar lesiones por un mal gesto repetitivo.
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